sábado, 6 de junio de 2015

Y el champú, ¿qué?


Bueno, sería inexacto decir que yo no uso champú nunca, porque de tanto en tanto me hago un lavado con un champú sin sulfatos para hacer una especie de limpieza general, para eliminar residuos de otros productos que hayan podido acumularse en el cuero cabelludo o, como a los fabricantes les gusta decir, para clarificar

Encontrar un champú sin sulfatos en mi pueblo ha sido muy pero que muy complicado, porque hasta los supuestamente naturales, sin parabenos ni siliconas, o los de cabello rizado, o los de cabello dañado, o seco o... en fin, que todos los que buscaba tenían sulfatos. 



Al final por suerte di con uno. ¡Bieeeeennnn! Es de la marca Swarcof, de la línea profesional (no se encuentra en supermercados) Bona Cure (o BC). El precio ronda los 8€. Es carillo pero como lo uso tan poco me dura una barbaridad!
En particular es el específico para cabellos teñidos. Y tiene su lógica que sea ese ya que el objetivo de esos champús es que el color dure más tiempo. Si se usan champús con sulfatos, que son tan agresivos, no sólo se lleva la suciedad y la grasa, también el color. 



Tengo también que añadir que la frecuencia con la que una persona va a necesitar lavarse el cabello con champús, aunque sean suaves, va a depender del tipo de cabello que se tenga y creo que también dependerá de lo "atrevida" que se sea, sobre todo al principio. 

Si te da susto abandonar tu champú del todo, intercala los lavados: una vez con acondicionador, otra vez con champú + acondicionador. O cualquier otra frecuencia con la que te sientas cómoda. 

Yo al principio lo hacía cada dos semanas. Ahora lo hago cada mes o mes y medio, cuando ya no recuerdo la última vez que me lo lavé con champú y entonces me da la sensación de que "ya toca". 

Una vez más, recordad que lo que me funciona a mi no tiene por qué funcionarte a ti. Hay que aprender lo que el pelo de una prefiere a base de probar y equivocarse.

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